Función de los productos solares

• Filtrar las radiaciones. Su misión fundamental es permitir que incida en la piel la cantidad de radiación solar que se estime conveniente en cada caso, según la tolerancia de cada piel, del fototipo, época del año, etc.

• Hidratar. En las exposiciones al sol hay que mantener la piel en un estado óptimo de hidratación, ya que el calor al que se expone, lógicamente, tiende a resecar. Por ello, deben ser ricos en aceites naturales y en productos humectantes.

• Acción antirradicales libres. Al incidir las radiaciones solares se generan antirradicales libres que deterioran las funciones celulares y aceleran la generación de arrugas. Por ello, es conveniente que lleven combinaciones de vitaminas que eliminen los citados radicales.

• Potenciar el bronceado. Con los productos cosméticos podemos intervenir en el proceso de generación de melanina: la tirosina es el aminoácido que da origen a la melanina, mientras que la riboflavina acelera la transformación de la tirosina en melanina.

Recomendaciones para tomar el sol

• Evitar la exposición al sol en las horas centrales del día.

• Repetir la aplicación periódicamente, en especial después del baño, del secado o de transpirar.

• No exponer a los bebés y a los niños pequeños al sol directo.

• Aplicar generosamente el protector, ya que si no se reduce significativamente la protección.